@Noudiari / Lo publicitan como una forma fácil y rápida de consumo colaborativo. La plataforma de alquiler de coches entre particulares Drivy, una empresa que nació en Francia en 2010 y cuenta en toda Europa con 35.000 coches y 700.000 usuarios, inició el año pasado su expansión por España y, ahora, aterriza en Ibiza.
Lejos de la polémica que han generado otras empresas de este tipo, como Uber, y a pesar del rechazo de colectivos como taxistas, hoteleros o rent-a-cars con respecto a este tipo de negocios, Drivy se anuncia como la opción “más humana” y económica. “El alquiler de coches mediante esta fórmula es alrededor de un 30% más barato que en sitios tradicionales. Otras ventajas pasan por la cercanía del servicio, su flexibilidad y el trato personal”, afirman desde la empresa.
Uno de los vehículos que se anuncian en Ibiza en la plataforma de alquiler de coches entre particulares.
Los precios de alquiler entre particulares, lógicamente, varían según el modelo del vehículo, el año de fabricación y el lugar. En Madrid, por ejemplo, se puede encontrar algún coche por un precio de 17 euros al día. En Ibiza, donde en la página web se anuncian 23 vehículos, el precio más bajo es de 25 euros por día por un Renault Clío y un Opel Astra 2.0 diesel, ambos de 2001 y propiedad de Juan Vicente y Sergio, respectivamente.
La media en las Pitiüses, sin embargo, está en torno a los 35 euros por jornada, aunque algunos, como es el caso de David, alquila su Jeep Wrangler por 100 euros. Eso sí, no se lo deja a cualquiera y pide en el anuncio sólo gente responsable y cuidadosa y que se abstengan “festeros”.
Una vez que usuario y propietario se han puesto de acuerdo, se hace efectiva la entrega de llaves y se firma un contrato que puede imprimirse desde la propia página web de la compañía o a través del teléfono móvil. A partir de ese momento, el coche está cubierto por una poliza de seguros específica, que reemplaza al seguro normal del propietario, por lo que, en caso de daño o robo, es el usuario el que responde. El 70% del precio del alquiler lo recibe directamente el propietario del coche, mientras que el resto se lo reparte Drivy y Allianz.
La compañía francesa asegura que esta opción de alquiler de vehículos entre particulares permite a los propietarios ganar de 1.000 euros al año en adelante, aunque avisa que dependerá de factores como “la disponibilidad, el tiempo de respuesta en el sitio web y el modelo y antigüedad del coche”.